Add parallel Print Page Options

Había un hombre de Zora, de la familia de los danitas, que se llamaba Manoa. Su mujer era estéril y nunca había dado a luz. Y el ángel del SEÑOR se apareció a la mujer y le dijo:

—He aquí que tú eres estéril y no has dado a luz, pero concebirás y darás a luz un hijo. Ahora, guárdate de beber vino o licor. Tampoco comas nada inmundo,

Read full chapter